El Sindicato de Empleados Públicos de Canarias -SEPCA- , denuncia la inactividad de la Consejería de Sanidad, en cuanto a la gestión de sus recursos humanos.
Ya es tónica habitual de esta organización sindical, hacer ver la cruda realidad de que “esté quien esté” al mando de la Consejería de Sanidad, la gestión de la Sanidad Canaria está sumida en un proceso inoperativo.
La actual Consejera no ha tenido aún el valor de presentarse ante los interlocutores legales en el ámbito de la negociación laboral sanitaria, que no es otro que la Mesa Sectorial de Sanidad y todo indica que se ha contagiado del proceso vírico de letargo de sus antecesores. Por ello desde SEPCA apreciamos la evidencia de que ese cargo político necesita ya una buena descontaminación.
Esta Consejera es una participante más del desfile de personajes políticos que han pasado por la pasarela de esta Consejería, que esquivan implicarse en la gestión del activo más importante que tiene que es el personal. Claro ejemplo de esta situación, es que inmersos en un proceso de estabilización de empleo que afecta a más de 12.000 personas que trabajan en la Sanidad Pública Canaria, resulta que aún estamos en los albores de dicho proceso, donde el tiempo va consumiendo los plazos para su desarrollo.
En igual situación de inactividad que su mandataria Consejera, tenemos al Director del Servicio Canario de la Salud, al que sus compromisos se le retrasan cada vez más en su agenda de trabajo. Un Director del Servicio Canario de la Salud que hasta el día de hoy no ha hecho más que copiar los mismos incumplimientos que sus antecesores. Mesas de trabajo inactivas, negociaciones pendientes de cerrar, compromisos adquiridos incumplidos, información inexistente…., suponen el bagaje negativo de la agenda de este otro cargo político que se supone que debería dirigir, nada menos que el Servicio Canario de la Salud.
Con respecto al Director General de Recursos Humanos de este mismo Servicio Canario de la Salud, solo mencionarlo sería un halago inmerecido, pero ya que cobra, para resumir su labor –que ya es un gran ejercicio resumir lo inexistente-, podríamos dedicarle el dicho de que “no recuerda el gallo, cuando fue pollo”.
Y todo esto mientras contemplan impasibles los titulares y estadísticas de siempre…«La Sanidad Canaria a la cola del Estado”, “Las listas de espera sanitarias de los canarios de las más elevadas del país”….., como si esto estuviera pasando en otro planeta.
Eso sí, para programas asistenciales (y mascarillas) parece que la Sanidad Canaria ha sido muy generosa, incluso alcanzando el podium del Estado. ¡Que bueno!
Canarias, 1 de abril de 2024